domingo, 26 de marzo de 2017

LOS TRATAMIENTOS ESTIMULANTES CREAN DEPENDENCIA?



Un lector del blog, me ha preguntado si es verdad que los tratamientos con estimulantes para el TDAH, generan dependencia y tolerancia en los pacientes. Así mismo un lector de este blog lo afirma que  engancha porque actúa a nivel dopaminergico, como las drogas.


Ante esta afirmación he creído necesario hacer una entrada en el blog para dejar claro sobre la dependencia de los pacientes o no dependencia de los estimulantes en los pacientes tratados con TDAH


Si alguien nos dice que….., “Voy a quitarle a mi hijo diabético la insulina, pues crea dependencia, y ya no puede vivir si ella.”   o si nos dijera.....“si deja la insulina, cuando pasa el efecto de esta, se produce un efecto rebote y le sube el azúcar en sangre.”  Está claro en esta situación que le diríamos que está loca esa persona y que no se le ocurriera dejar de ponerle a su hijo la insulina, pues  le hace falta para vivir  y que no le produce pendencia, y sobre que cuando se le pasa el efecto de la insulina, no es que se produzca un efecto rebote, sino que le sube el azúcar como cuando antes de no ponerse la insulina.
En el paciente con toda estamos en la misma situación que el paciente diabético que necesita insulina. El diabético no está enganchado a la insulina, simplemente es que le hace falta para vivir. El paciente con TDAH  el tratamiento farmacológico le regula la alteración o disminución de los neurotramisores que le falta en su sistema nervioso central.

Es verdad que los estimulantes y no estimulantes actúan en la regulación de la dopamina. Sabemos que los estudios de genes relacionados con TDAH, se han centrado en las vías dopaminergicas, los tratamientos con estimulantes han mostrado su efectividad en la reducción de síntomas actuando a este nivel. El mecanismo de acción del metilfenidato es la inhibición del trasportador de dopamina (DAT) y la lisdexanfetamina además de inhibir este DAT, también actúa en la liberación de dopamina a nivel presipnactico.

Los estudios de genes vinculados con el TDAH,  cuatro de ellos están implicado en la vía dopaminergica:

Dopamina beta hidroxilaxa. (DBH)
Trasportador de la dopamina (DAT1)
Receptores de la dopamina  D4,D5 (DRD4, DRD5)

Así tenemos que el SLCD6A3 (DAT), actúa en la decapitación del a dopamina y sea la causante de a falta de inhibición, flexividad de atención, inatención e impulsividad. Así mismo el DRD4 que actúa en el receptor D4 de la dopanimina está relacionado con las habilidades de memoria verbal, inatención e hiperactividad. El DRD5, en el receptor D5 de la dopamina está relacionado con la intención,  y variabilidad del tiempo de respuesta.
Bueno está claro que los estimulantes actúan parte sobre el sistema dopaminergico, pero esto no quiere decir que generen dependencia.

¿Los estimulantes producen un efecto rebote en los pacientes cuando se deja la medicación?

EL PACIENTE HIPERTENSO SI DEJA
LA MEDICACION , LA TENSION ARTERIAL SE LE DISPARA
Primero vamos a ver que entendemos por rebote. Cuando nosotros dejamos caer una pelota de tenis contra el suelo, esta rebota y hasta incluso es capaz de subir más alto desde el punto que nosotros la dejamos caer, yes cundo decimos que o reboto con más fuerza. En los pacientes tratados con estimulantes al final del dia cuando se pasa e efecto de la medicación, el paciente vuelve a su estado original de despistes e hiperactividad. No es realmente un rebote sino que vuelve la clínica del tdah que estaba controlada por la medicación. Esto no podemos pensar que crea dependencia y por eso pasa esto, pues realmente es lo mismo que le pasa al paciente hipertenso que deja de tomar tratamiento, al dia siguiente se le dispara la tensión arterial obteniendo cifras altas, que antes no las tenía por tener la tensión arterial controlada por los fármacos, y en este caso nadie se le ocurre decir que tiene dependencia el enfermo a los fármacos antihipertensivos.  Por este mismo planteamiento ni los pacientes con hipertensión están enganchados a sus fármacos como tampoco los pacientes con tdah tratados con estimulantes están enganchados a sus fármacos.

Sabemos que el 40% de los pacientes en el paso de la etapa infantil a la adulta, compensa el TDAH.  Los médicos para ver que posible evolución tendrá en el futuro, si se mantiene por vida como ese 60% que curan su tdah, lo que hacemos es sugerir al paciente que en verano suspenda por una temporada el tratamiento farmacológico, con la intención de poder observar la clínica de su tdah sin tratamiento, y la intensidad de sus síntomas de falta de atención hiperactividad o impulsividad.

Un estudio de Bierderman, sobre el seguimiento a lo largo de 10 años, comprobó que los pacientes que no habian tomado estimulantes, bien por negativa de los pacientes o de sus padres o por no poder tomarlos por algun mootivo. tenían una prevalencia del doble que la población de consumo de drogas, mientras aquellos pacientes que fueron tratados con estimulantes, presentaban la misma prevalencia de consumo de drogas que la población general sin TDAH. llegando por tanto a la conclusión que no solo el tomar estimulantes los pacientes con tdah no aumentaba el riesgo de ser toxicómanos sino que era un factor protector para que en un futuro no fuesen toxicómanos.


CONCLUSIONES

los fármacos estmulantes no engancha a los pacientes de la misma forma que no engancha los tratamientos para la diabetes o para la tensión arterial en los pacientes que toman medicacion.

los fármacos estimulantes disminuyen el riesgo de tener problemas de adiciones en un futuro.

no existe efecto rebote de la medicación sino que cuando se pasa el efeco de la medicacion el pciente aflora la clínica del TDAH de la misma forma que el paciente hiertenso que deja de tomar la medicación se le dispara la tension arteria con cifras altas

miércoles, 15 de marzo de 2017

Un astronauta con déficit de atención

El astronauta Scott Kelly se sincera acerca de sus dificultades de atención

En las noticias entrada del blog de Geri Coleman Tucker 
Mar 08, 2017
Foto de Scott Kelly
El astronauta Scott Kelly es mejor conocido como el primer estadounidense en pasar un año en el espacio. Vivió a bordo de la Estación Espacial Internacional durante 340 días, y tiene el récord de la misión espacial más larga realizada por un estadounidense (su gemelo idéntico, Mark, también es astronauta).
Pero en una entrevista reciente en el periódico Santa Barbara Independent, Kelly reveló que de niño pensaba que no podría ser astronauta debido a sus dificultades de atención.
“Nunca creí que fuera posible porque tenía dificultad para poner atención en la escuela” afirmó. “Si hoy en día fuera un niño, habría sido diagnosticado con TDA o TDAH. Era imposible. Cada año yo pensaba: ‘Este será el año en el que voy a empezar a prestar atención y hacer mi tarea’. Y eso duraba dos días”.
Kelly nació en 1964, años antes de que el TDAH fuera oficialmente reconocido. No fue hasta 1980 que el “TDA” apareció por primera vez en el DSM, el manual que los profesionales en el área de la salud mental usan para hacer diagnósticos.
Kelly dice que “no fue un buen estudiante” en bachillerato. Se distraía fácilmente y se aburría, y terminó graduándose con un puntaje inferior al promedio de su clase. En su búsqueda de un ambiente más reglamentado que lo ayudara a enfocarse en los deberes escolares, ingresó al programa Navy ROTC de State University of New York Maritime College. Resultó ser justo lo que necesitaba.
Un día que estaba en la librería de la universidad, encontró The Right Stuff, un libro escrito por Tom Wolfe acerca de los inicios del programa espacial de los Estados Unidos. Fue uno de los primeros libros que compró y leyó. Devoró el libro e inmediatamente decidió que quería ser astronauta.
El resto es historia. Kelly obtuvo un título de ingeniero, se convirtió en piloto de la marina y participó en cuatro misiones espaciales, registrando un total de 382 días en el espacio.
En el 2016, al regresar de su última misión, Kelly se retiró de NASA. Ahora está escribiendo la autobiografía de sus experiencias titulada Endurance: My Year in Space and Our Journey to Mars. Se prevee que el libro se publique en noviembre del 2017, y Sony Pictures ya adquirió los derechos de la película.
A continuación hay un montaje en video del Centro Espacial Johnson de NASA acerca del año que Kelly pasó en el espacio: